¿Y
esos frejolitos con salsa criolla a la hora de almuerzo?
¡Infaltables!
Sin
embargo, muchas personas no las preparan porque desconocen su verdadero valor nutricional o porque piensan que a los niños no les va a gustar. ¡Grave error!
Las menestras son 100% alimenticias y muy económicas; dos razones para
incluirlas en el menú de la semana.
Propiedades
de las menestras
Dentro
de los tipos de menestras tenemos lentejas, frejoles (negros, rojos, canario,
panamito…), arveja partida, garbanzos, pallares, entre otros. En todas estas
encontramos los siguientes beneficios y propiedades:
Calcio.
Perfecto para tener huesos y dientes más fuertes. Los niños están en constante
desarrollo y necesitan consumir mucho calcio; recuerda que este no solo se
encuentra en derivados de la leche.
Hierro.
Muy importante para evitar la anemia en los pequeños de la casa, así como para
que mantener su sistema inmune muy fuerte.
Proteínas.
Proporcionan materiales que sirven para la formación y reparación de los
tejidos del organismo. Las menestras contienen proteína vegetal, que es mucho
más sana que la de origen animal.
Carbohidratos.
Son necesarios para aportarle esa energía que tu nene tanto necesita para
seguir creciendo.
Fibra.
La fibra ayuda a regular el tránsito intestinal, incentivando a que el niño
pueda evacuar al menos una vez al día. Como punto adicional, se dice que el
consumo de menestras estimula la reproducción y regeneración celular, por eso
son fundamentales dentro de la dieta de los más pequeñitos, quienes están en
pleno desarrollo.
Puedes
prepararlas de diversas maneras: en sopa, como hamburguesas, en ensaladas, como
tacu tacu, para una entrada e incluso como postre (manjar de pallares o frejol
colado).
La
idea es variar en el menú del día!
Organización Promotora de Actividades Educativas,Desarrollo y Bienestar Social sin fines de Lucro en beneficio del más necesitados niños,joven y adulto mayor.
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