“Yo sufrí dos
accidentes graves en mi vida,
uno en el que un autobús me tumbó al suelo...
el
otro accidente, ¡es Diego!”
Frida Kahlo
Diego:
Mi amor, hoy me acordé de ti aunque no lo mereces tengo que reconocer que te amo. Cómo olvidar aquel día cuando te pregunté sobre mis cuadros por vez primera. Yo chiquilla tonta, tu gran señor con mirada lujuriosa me diste la respuesta aquella, para mi satisfacción por verme feliz, sin conocerme siquiera me animaste a seguir adelante. Mi Diego del alma recuerda que siempre te amaré aunque no estés a mi lado. Yo en mi soledad te digo, amar no es pecado a Dios. Amor aún te digo si quieres regresa, que siempre te estaré esperando. Tu ausencia me mata, haces de tu recuerdo una virtud. Tu eres el Dios inexistente cada que tu imagen se me revela. Le pregunto a mi corazón por que tu y no algún otro. Suyo del alma mía.
Frida K.
Diego:
Nada comparable a tus manos, ni nada igual al oro-verde de
tus ojos. Mi cuerpo se llena de ti por días y días. Eres el espejo de la noche.
La luz violeta del relámpago. La humedad de la Tierra. El hueco de tus axilas
es mi refugio. Toda mi alegría es sentir brotar la vida de tu fuente-flor que
la mía guarda para llenar todos los caminos de mis nervios que son los tuyos,
tus ojos, espadas verdes dentro de mi carne, ondas entre nuestras manos. Solo
tú en el espacio lleno de sonidos. En la sombra y en la luz; tú te llamarás
auxocromo, el que capta el color. Yo cromóforo, la que da el color. Tú eres
todas las combinaciones de números. La vida. Mi deseo es entender la línea, la
forma, el movimiento. Tú llenas y yo recibo. Tu palabra recorre todo el espacio
y llega a mis células que son mis astros y va a las tuyas que son mi luz.
Frida
"Diego, mi amor,
No se te olvide que en
cuanto termine el fresco
nos
juntaremos para siempre una vez por todas, sin planteos ni nada, solamente para
querernos mucho.
No te portes mal y has todo lo que Emmy Lou te diga.
Te adoro más que nunca
Te adoro más que nunca.
tu niña, Frida
(Escríbeme) "
Mi Diego:
Espejo de la noche.
Tus ojos espadas verdes dentro de mi carne, ondas entre nuestras manos.
Todo tú en el espacio lleno de sonidos - En la sombra y en la luz. Tú te llamarás Auxocromo el que capta el color. Yo Cromoforo - La que da el color.
Tú eres todas las combinaciones de números. La vida.
Mi deseo es entender la línea la forma el movimiento. Tú llenas y yo recibo. Tu palabra recorre todo el espacio y llega a mis células que son mis astros y va a las tuyas que son mi luz.
De Frida Kahlo a Diego Rivera, cuando ya estaban
divorciados, 11 de junio de 1940
"Ahora que hubiera dado la vida por ayudarte, resulta
que son otras las 'salvadoras'... Pagaré lo que debo con pintura, y después
aunque trague yo caca, haré exactamente lo que me dé la gana y a la hora que
quiera... Lo único que te pido es que no me engañes en nada, ya no hay razón,
escríbeme cada vez que puedas, procura no trabajar demasiado ahora que
comiences el fresco, cuídate muchísimo tus ojitos, no vivas solito para que
haya alguien que te cuide, y hagas lo que hagas, pase lo que pase, siempre te
adorará tu Frida".
México, 1953
Sr. mío Don Diego:
Escribo esto desde el cuarto de un hospital y en la antesala
del quirófano. Intentan apresurame pero yo estoy resuelta a terminar ésta
carta, no quiero dejar nada a medias y menos ahora que sé lo que planean,
quieren herirme el orgullo cortándome una pata... Cuando me dijeron que habrían
de amputarme la pierna no me afectó como todos creían, NO, yo ya era una mujer
incompleta cuando le perdí, otra vez, por enésima vez quizás y aún así
sobreviví.
No me aterra el dolor y lo sabes, es casi una condición inmanente
a mi ser, aunque sí te confieso que sufrí, y sufrí mucho, la vez, todas las
veces que me pusiste el cuerno...nó sólo con mi hermana sino con otras tantas
mujeres...¿Cómo cayeron en tus enredos? Tú piensas que me encabroné por lo de
Cristina pero hoy he de confesarte que no fue por ella, fue por ti y por mi,
primero por mi porque nunca he podido entender ¿qué buscabas, qué buscas, qué
te dan y qué te dieron ellas que yo no te di? Por que no nos hagamos pendejos
Diego, yo todo lo humanamente posible te lo di y lo sabemos, ahora bien, cómo
carajos le haces para conquistar a tanta mujer si estás tan feo hijo de la
chingada...
Bueno el motivo de esta carta no es para reprocharte más de
lo que ya nos hemos reprochado en esta y quién sabe cuántas pinches vidas más,
es sólo que van a cortarme una pierna (al fin se salió con la suya la
condenada)... Te dije que yo ya me hacía incompleta de tiempo atrás, pero ¿qué
puta necesidad de que la gente lo supiera? Y ahora ya ves, mi fragmentación
estará a la vista de todos, de ti... Por eso antes que te vayan con el chisme
te lo digo yo "personalmente", disculpa que no me pare en tu casa
para decírtelo de frente pero en éstas instancias y condiciones ya no me han
dejado salir de la habitación ni para ir al baño. No pretendo causarte lástima,
a ti ni a nadie, tampoco quiero que te sientas culpable de nada, te escribo
para decirte que te libero de mí, vamos, te "amputo" de mi, sé feliz
y no me busques jamás. No quiero volver a saber de ti ni que tú sepas de mí, si
de algo quiero tener el gusto antes de morir es de no volver a ver tu horrible
y bastarda cara de malnacido rondar por mi jardín.
Es todo, ya puedo ir tranquila a que me mochen en paz.
Se despide quien le ama con vehemente locura, Su Frida
0 Tú opinión importa...:
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